Jorge Mackey organiza los festejos.
Es bisnieto de
inmigrantes irlandeses y recalca el carácter religioso de la fiesta del
santo patrono.
Los bisabuelos de Mackey llegaron al país hacia 1890, huyendo de
una crisis económica. Se afincaron en el sur de la provincia de Santa Fe, para
hacer lo que conocían: criar ovejas y cultivar papas. Primero fueron puesteros
y después tuvieron sus propias tierras. Más adelante, como muchos otros
inmigrantes irlandeses, se radicaron en la provincia de Buenos Aires.
Los irlandeses solían encontrarse en
misa, en los velorios y en los bailes. "Mis abuelos se conocieron en un
velorio. Los conocidos se quedaban dos o tres días en la casa del finado.
Y no faltaba el cura que armaba las parejas", cuenta Mackey. La otra
ocasión de reunión era San Patricio. "Cuando caía en domingo, se hacía una
peregrinación a Luján. Los irlandeses llegaban desde distintos puntos del país
en tren, en auto y hasta a caballo".
En Buenos Aires, las reuniones se
hacían en la parroquia de San Patricio, en Belgrano R, o en la de Santa Cruz,
en San Cristóbal. "Había una misa y después una reunión gastronómica y
bailes. Se comía chicken pie (pastel de pollo) y tortas caseras y se bebía whiskey,
porque en irlandés se escribe con 'e' y significa 'agua de vida'. Cerveza
también, pero no teníamos la Guinness, que llegó en los 90", aclara
Mackey. Y explica que todas estas tradiciones se fueron pasando de generación
en generación.
Información: http://www.clarin.com/ciudades/San-Patricio-descendiente-irlandeses-tradicion_0_1541246279.html
Inicio blog: http://aninesmacadamnews.blogspot.com.ar/
Muy interesante !
ResponderEliminarSaludos
Mark de Zabaleta
Muchas gracias Mark.
ResponderEliminarSaludos,
Aninés Macadam