En el año 1856 un joven matrimonio procedente de
Capellades (Barcelona) llamados José Ferrer y Poch y Josefa Vidal y Fragoso,
llega a Sevilla para así poder poner rumbo a Cádiz y de allí embarcar a
América, probar fortuna, y empezar una nueva vida. Lo llamaban por aquel
entonces “Hacer las Américas”.
Por razones del azar, aquel barco que sólo partía dos
veces al año, zarpó sin ellos. Así que la joven pareja decidió montar su
pequeño negocio en Sevilla mientras esperaba a que transcurriesen otros seis
meses. Alquilaron un pequeño local en el número 5 de la calle Sierpes y se
dedicaron a hacer lo que mejor sabían: fabricar tinta para que los demás
pudieran hacer lo que a nuestros días ha llegado como una pasión: Escribir.
Aquella Sevilla de mediados del Siglo XIX se
transformó en su querida “América” y decidieron quedarse para transmitir de
generación en generación el amor por el buen papel, las tintas con sus
infinitos colores y matices y la caligrafía clásica con sus plumillas y
cálamos. Una profesión que heredó su hijo Federico Ferrer y Vidal, y éste transmitió
a su vez a sus hijos, Manuel y Adolfo Ferrer González.
Estrella Ferrer, en la cuarta generación afronta los
momentos del cambio de tendencia, el de la era informática, el cambio del lápiz
por el teclado. Con la certeza de que hay pasiones que no tienen fecha de
caducidad, amplía horizontes y pone a disposición útiles de escritura de marcas
Japonesas, las últimas tendencias en estilográficas y tintas de las marcas más
emblemáticas, bellísimos papeles húngaros, encuadernaciones francesas hechas a
mano, diarios con cubiertas de piel y bronce así como plumas de ganso rematadas
en preciosa orfebrería italiana. Todo esto sin dejar de lado los icónicos
artículos de escritorio fabricados en España, los objetos nostálgicos que
caracterizaron la papelería clásica y un sinfín de curiosidades que hacen del
escritorio un espacio con vida.
Han pasado cinco generaciones de Ferrer y sólo
queremos mantener el legado tan bonito que de padres a hijos ha ido pasando:
Ayudarte a Escribir.
Muy interesante ...
ResponderEliminarSaludos
Mark de Zabaleta
Gracias Mark por el comentario.
ResponderEliminarSaludos,
Aninés Macadam